Siempre que este nombre sale en una de mis conversaciones, va acompañado de la misma frase: "ese tío es Dios". Nobuo Uematsu, para aquellos a los que el nombre les suene a japonés (no he podido evitar el chiste fácil, lo siento) es un compositor principalmente conocido por sus trabajos en la saga Final Fantasy ( y qué trabajos) aunque también ha realizado la banda sonora de otros juegos como Lost Odissey o Super Smash Bros Brawl.
La música de un videojuego suele despertar dos reacciones: o silencias la tele/ videoconsola porque sientes que los tímpanos van a reventarte (aún alucino al recordar que jugaba al Pokémon de Game Boy con el volumen puesto y era capaz de aguantar sin meter la cabeza debajo del colchón cuando a un pokémon le quedaban pocos PV) o simplemente no te das cuenta de que está sonando una musiquilla mientras pegas espadazos o salvas el mundo. Este señor consigue que adviertas que hay algo más aparte de tu monigote de la tele; hay algo que hace que te sumerjas en el juego, que te pongas en tensión cuando cuando aparece el malo de turno, que llores cuando se muere el amigo del protagonista: su música.
Sin querer darle a este hombre todo el mérito (tampoco es que al jugar cualquier título cuya BSO corra a su cargo, uno se olvide de dónde está y con la mirada perdida se ponga a tararear el tema principal del juego) me atrevo a afirmar que muchos de los "momentos Final Fantasy" son lo que son porque la música de Uematsu les acompaña: La aparición de Sephiroth y su Masamune cuando comienza a sonar "One winged angel" en Final Fantasy AC siempre consigue ponerme los pelos de punta; la batalla de Yitán en Pandemonium con "You're not alone!" de fondo me ha arrancado unas lagrimillas más de una vez... Y para demostrar este hecho, contamos con la crítica que recibió la OST del [ironía] excelente y sublime [/ironía] Final Fantasy X-2 y las quejas de los fans acerca de los temas del videojuego Final Fantasy XII; ambos títulos en los que no se dejó la música en manos de Uematsu (y gracias al cielo, Square-Enix parece haber aprendido la lección).
La música de Nobuo se integra perfectamente con la trama del videojuego. Cada nota está en su sitio, el ritmo es el adecuado, los instrumentos los más acordes a la escena y el resultado final completamente inolvidable. Si Final Fantasy es una de las grandes sagas, tiene mucho que agradecerle al trabajo de este músico... Pero ahí no se queda la cosa: después de componer la música para la mejor saga de RPG's de la historia... ¿Quedaba algo por hacer? Por supuesto que sí.
The Black Mages: la sublimación de lo sublime
Cuando todos dudábamos de que fuese posible escuchar algo mejor que la OST de la saga Final Fantasy, Nobuo crea en 2003 un grupo de música: The Black Mages. Con un estilo muy alternativo de rock, guitarras eléctricas y batería, consiguió transformar sus melodías sin hacer que perdiesen aquello que les caracteriza. Este grupo ha lanzado hasta ahora tres discos: "The Black Mages", "The Black Mages II: the skies above" y "The Black Mages III: darkness and starlight", en los que podemos encontrar remixes de la primera a la décima entrega de la saga: Those who fight further, Hunter's Chance, Battle with Seymour... todos ellos de una calidad excelente.
Además se deben mencionar las adaptaciones a piano de las melodías (las "Piano Collection"); así como los numerosos conciertos que se han interpretado (el Tour de Japón el más reciente de todos y uno de los más exitosos) que si bien, Nobuo Uematsu no ha participado activamente en todos ellos, ha sido gracias a sus melodías originales que han podido llevarse a cabo.
Y para finalizar esta entrada, una mención especial a los "arrange" que se han efectuado para crear la OST de Dissidia Final Fantasy (imprescindible en cualquier biblioteca gamer de música) concretamente al que, en mi opinión, es la mejor versión existente de una de mis canciones favoritas: Battle 1 from Final Fantasy IX:
http://www.youtube.com/watch?v=5qDUlHhpcns
